La enorme transformación de la fuerza laboral que tuvo lugar a gran velocidad en 2020 comenzó como una crisis de salud y se convirtió rápidamente en una crisis económica y social. Inicialmente, industrias completas como la hotelería, el turismo e incluso la manufactura se congelaron de la noche a la mañana, mientras que otras, incluidas las de tecnología, atención médica, logística y alimentos, vieron una demanda inmediata y sostenida de trabajadores.
Sin embargo, un año después, el surgimiento de una recuperación se observa desde dos caminos en forma de K. Algunas industrias y personas se están recuperando más rápido y mejor, aquellas en sectores en crecimiento y con habilidades de alta demanda, mientras que otras corren el riesgo de quedarse más atrás. Siendo la digitalización factor clave para el resurgimiento donde se reconoce que más del93% de las personas cambiaron drásticamente la forma en que trabajan, viven y consumen al mismo tiempo.
“Las tendencias que hemos estado prediciendo antes de la crisis se están acelerando a gran velocidad y también están surgiendo nuevas. Observamos como la escasez de habilidades se profundiza ante requerimientos específicos, creando importantes brechas entre quienes las poseen y los que no. Se perciben cambios importante en los candidatos, quienes buscan trabajos flexibles y abiertos a trabajos híbridos entre presencial y remoto. Empresas que se abren paso en el nuevo normal, más resilientes sobre sus negocios y la gestión de incertidumbre y riesgo”. comentó Andrés Soto, gerente de País Guatemala para ManpowerGroup.
Soto agregó “Las empresas deben ser ahora un negocio digital enfocado en la experiencia del consumidor y contar con la mejor combinación de talento y tecnología. Si agregamos el impacto de la pandemia, podemos esperar una transformación continua y profunda en los mercados y la fuerza laboral”.
La digitalización está cambiando la forma de trabajo. Según el estudio de Manpower Group, el 38% de las empresas están acelerando su digitalización y automatización como resultado dela pandemia y el 86% de los empleadores que están automatizando planean aumentar o mantener su plantilla, en comparación con solo el 11% de los empleadores que planean reducir o mantener sus planes para automatizar. Esto implica que la digitalización crea la mayor cantidad de puestos de trabajo.
Un hallazgo importante a resaltar del estudio, es que las industrias más afectadas por la crisis están divididas; algunos automatizan y digitalizan para adaptarse rápidamente, mientras que otros adoptan un enfoque de esperar y ver, pausando sus planes en materia de digitalización. 21% de los empleadores de manufactura, finanzas, seguros y bienes raíces esperan acelerar su digitalización, mientras que en retail y construcción será de 19% y 17% respectivamente.
A medida que las organizaciones se transforman y digitalizan a velocidad y escala, las necesidades de habilidades también se están transformando. Para 2025, las personas y las máquinas dividirán las tareas relacionadas con el trabajo al 50%, mientras que 97 millones de nuevos empleos surgirán en la IA, la economía verde y la economía del cuidado.
“Las habilidades profesionales, como comunicación, gestión, priorización del tiempo, adaptabilidad, pensamiento analítico, toma de iniciativas y empatía son más valoradas y buscadas por los empleadores: son la columna vertebral del éxito. Las organizaciones se están dando cuenta de que necesitan una fuerza laboral de aprendizaje continuo: ágil para
nuevas tareas, preparada y resistente para tiempos de cambio y disrupción. El cambio masivo al trabajo remoto significa que la colaboración, el trabajo en equipo y otras habilidades profesionales tienen mayor demanda.” concluyó Andrés Soto, Gerente de País Guatemala para Manpower Group.