A pesar de la recesión económica que sufre el país en la
actualidad, las proyecciones parecen ser favorecedoras, según cifras de Cepal se estima que
el PIB en Guatemala aumente 4% para el 2022; apoyado en gran medida por el sector
construcción que para el año 2021 fue clave para el crecimiento y recuperación productiva
del país, de acuerdo con datos presentados por el Banco de Guatemala (Banguat).
Desde Amanco Wavin les compartimos lo que los expertos consideran será tendencia para
la industria de la construcción en el 2022:
Retos en infraestructura: El acelerado crecimiento de la región trae consigo una
serie de retos para la infraestructura de Guatemala. Según datos de Guatecompras,
en 2021 el 95% de los contratos que tienen que ver con infraestructura vial que el
Ministerio de Comunicaciones Infraestructura y Vivienda ha licitado tiene que ver
con emergencias por las lluvias o por mantenimiento rutinario de las carreteras. Esto
ha provocado que varios proyectos de mayor escala y que a la larga tendrán un
impacto positivo en el país quedaran relegados ante la necesidad de solventar
problemáticas más urgentes.
Construcción sostenible: El futuro de la industria de la construcción en el país debe
apuntar a una reactivación paulatina a través de la innovación y el desarrollo
sostenible, no sólo a nivel ambiental, sino también económico. Para esto, es
necesario evaluar las construcciones y hacia dónde se dirigen los esfuerzos, además
de continuar fortaleciendo el uso de tecnologías alternativas para generar un cambio
local con enfoque global en términos económicos, ambientales y sociales.
“Guatemala debe continuar los esfuerzos en materia de construcción hacia
tecnologías que garanticen una fusión entre el desarrollo tecnológico y las nuevas
tendencias de sostenibilidad. Un edificio inteligente puede generar ahorros de un
30% o más en energía y agua, así como también, contribuye hasta en un 35% la
disminución de gases de efecto invernadero. El país ha venido trabajando en ello,
por tanto, consideramos que será un camino que seguirá fortaleciéndose”, asegura
Jorge Jean, director de marketing para México y Centroamérica de Amanco Wavin.
Recurso hídrico: El acceso al recurso hídrico para las personas sigue siendo un reto
en múltiples frentes, pero, además se estima que aproximadamente el 90% de los
desastres naturales se vinculan al agua. Inundaciones y sequias anualmente cobran
miles de vidas y afectan a millones de personas física y económicamente alrededor
del mundo, y se espera que el cambio climático aumente la frecuencia y la magnitud
de los fenómenos meteorológicos extremos; por ello generar construcciones que integren soluciones como: recolectar volúmenes importantes de lluvia para
liberarlos de manera controlada o incluso para utilizarse en labores de limpieza y
mantenimiento; así como tecnología que permita el menor desperdicio, o sistemas
inteligentes que detecten cualquier fuga de agua potable son más que un valor
agregado se está convirtiendo en una necesidad.
“El agua hasta hace pocos años no era prioridad, sin embargo, el cambio climático y
la urbanización progresiva han traído consigo retos en la demanda del suministro y el
manejo de aguas pluviales y residuales, que se han convertido en una preocupación
importante de la industria” agrega Jorge Jean.
Tecnologías inteligentes: El futuro será liderado por los softwares en construcción,
materiales de alta calidad, súper estructuras, impresión 3D y la metodología BIM; es
decir tecnología que desde el proceso constructivo contribuya en la disminución de
costos, evaluación inteligente del impacto y menor consumo energético y de agua;
esta es otra de las tendencias que continuará expandiéndose en el 2022.